27.6.09

Confía en ellos


CINCO REGLAS DE ORO

PARA TRATAR

A LOS ADOLESCENTES


www.agea.org.es


Muchos padres se quejan al llegar la adolescencia de la dificultad de comunicación con sus hijos. En esa época de la vida no basta que queramos comunicarnos, es necesario que ellos también lo deseen.

1.- Darles oportunidad de ser responsa-bles, delegándole responsabilidades.

Para eso tienen que saber que se confía en ellos y les consideramos capaces.


2.- Que el adolescente participe de las discusiones, alegrías y preocupaciones de la familia.

Se les debe informar para que se involucren, colaborando - si pueden hacer algo - o rezando para que el problema se solucione.


3.- De aquí se podría deducir otra regla: Comuniquemos a nuestros hijos cómo nos sentimos.

También tenemos el derecho y la libertad para expresarles nuestros propios sentimientos y ser oídos: alegrías, cansancio, una buena o mala jornada laboral, etc.


4.- No dejar de exigirles en el plano moral y social.

No basta pedir perdón, a veces creen solucionado el problema, sino compensar con un detalle su falta.


5.- La formación de un frente unido.

En todas las edades, pero aún más en la adolescencia, es importante el hecho de que los hijos vean que padre y madre van en la misma línea de exigencia.

Es importante la formación de un frente unido para la batalla, sobre todo en las cuestiones que ustedes consideren importante que obedezcan, y eso les toca a ustedes decidirlo a lo mejor con papel y lápiz.

Es muy necesario el frente unido. No nos encontremos en la situación en la que uno tenga que ser "el malo" mientras que el otro sea siempre "el bueno".


ARTICULO COMPLETO


Pregunte y se le contará. cahertal@yahoo.com.mx Hasta la próxima.



2.6.09


CARIDAD O AMOR

EN ESTOS TIEMPOS


Dicen que "la corrupción de lo mejor es lo peor." Así ha pasado con la caridad o amor y, aunque por ahora no tengamos claridad transparente en estos términos, nos referiremos a ambos para lograr nuestro objetivo, reflexionar al respecto de la ausencia de ambos no solo en el ámbito literario sino, también, en el de la vida real.


Lo que está en juego es la concepción del amor. Un sector le da un sentido meramente sentimental, instintivo o de impulsos. Cultiva el amor en la vida social pero la excluye de la privada. Promueve la limosna para los necesitados pero les pide, a cambio, un gran reconocimiento y los votos, si es posible. Mientras que, en el ámbito de lo particular, sus allegados mendigan las migajas del amor entrega.


En otros tiempos se quería resolver, por medio de la limosna o caridad, algunos problemas sociales. Actualmente los mismos problemas sociales se cree que son aliviados sin caridad y sin limosna, únicamente con la palabra que quiere promover a la sociedad del subdesarrollo.


Actualmente, en el mundo de lo familiar, los del amor, caridad o limosna son los padres y, Lázaro, la multitud de hijos engendrados sin, precisamente, el amor auténticamente cristiano. En qué consiste el sentido exacto de la caridad cristiana? La respuesta nos pide una comprensión adecuada de la parábola del buen samaritano, del juicio final en el evangelio según san Mateo; y, también, un entender exacto de la carta del apóstol Santiago.


El amor o caridad de los padres hacia los hijos debe de vivir, ya, el sentido exacto de sus significado a tal grado que se le realice en su sentido y lugar correctos. Mas caridad y promoción en lo social y acertada relación de amorosa entrega y donación en los reducidos espacios de la pareja, familia y célula social.


Si los padres que deben educar a los hijos no aman y sólo dan limosna, seguirán haciendo de sus hijos personas cada vez más pasivas. Esas limosnas afectivas seguirán agravando la separación entre familias y generaciones. Entonces hay que decir que esa caridad o limosna no es amor sino en cuanto intente superar y restituir a los hijos su dignidad.


Entonces la caridad, para serlo realmente, ha de tender a suprimir la situación que hace necesaria la limosna; y a acrecentar en todos los ámbitos de la familia y sociedad la presencia del verdadero amor cristiano de generosa oblación.


En conclusión podemos decir: nos hace falta definición en todo lo concerniente al verdadero amor. Sólo con la transparencia del término, la caridad y la limosna, recobrarán su utilidad en la familia y en la sociedad.


Pregunte y se le contará. cahertal@yahoo.com.mx Hasta la próxima.